¿Qué lleva en la mochila Matthias Scherer?

Matthias Scherer nos descubre el contenido de su mochila después de haber completado la vuelta al macizo del Grand Paradis en Italia. ¿Qué tiene de especial su proyecto? Concluir la vuelta en menos de 20 horas en lugar de los 5 días habituales. En este artículo, Matthias nos explica por qué ha escogido este material.

1. Esquís ligeros, pero rígidos con patín de 75 mm para un buen agarre en nieve dura, pala de 107 mm y cola de 94 mm para una flotación suficiente en nieve blanda. Yo utilizo los Maestro de La Sportiva de 171 cm que pesan 940 g y que están equipados con fijaciones Trab Gara Titan Release, lo que hace un poco más de un kilo por pie sin sacrificar ni la estabilidad ni la seguridad. También incorporan unas correas para evitar perder un esquí. Bastones ligeros de carbono con un poco de cinta adhesiva de tela para pequeñas reparaciones o para reparar las pieles.
2. Una mochila de 30 litros con un sistema para llevar los esquís en diagonal, funcional y provista de una bolsa para crampones accesible desde el exterior de la mochila para ir más rápido. Un bolsillo en el cinturón permite llevar alguna herramienta, cera, una navaja y un poco de cordino.
3. Un buen plumón: siempre hace frío por encima de los 4.000 m de altitud antes de que salga el sol, y si añades un poco de viento y estás cansado, se necesita una chaqueta que retenga bien el calor. Si tienes que pararte mucho rato por cualquier razón, la chaqueta te va a salvar la vida. ¡Nunca salgas sin tu plumón!
4. Botas ligeras, calientes, con buenas prestaciones para el descenso y que funcionen bien con crampones.
5. Una linterna frontal ACTIK: mi frontal de emergencia. Finalmente, no me hizo falta, pero más vale no encontrarse en un glaciar con grietas o una arista expuesta por la noche y sin iluminación…
6. Una linterna frontal NAO+: mi linterna preferida. Con una sola carga, he aguantado toda la noche. La iluminación REACTIVE LIGHTING adapta instantáneamente la potencia luminosa, lo que permite focalizarse sobre el terreno, en el siguiente paso o en el material optimizando a la vez la autonomía. Enciendo la NAO+ cuando empiezo por la noche y la apago cuando sale el sol, ¡durante la noche no toco nada de nada! El testigo rojo en la parte posterior funciona de maravilla, sobre todo, para estar bien visible, incluso en el descenso.
7. Baterías adicionales para NAO+ y ACTIK: no las necesité, pero pesan muy poco y te permiten continuar el camino en vez de tener que pasar la noche fuera con el frío…
8. Un walkie-talkie: una radio para cada miembro del equipo más una que permita contactar con los servicios de rescate. Además, nos llevamos una baliza GPS FastFind Ranger.
9. Un kit RAD SYSTEM: si tenéis previsto atravesar un glaciar, hay que llevar un RAD SYSTEM.
10. Un arnés ALTITUDE: es tan ligero que nos olvidamos que lo llevamos puesto. Las trabillas en las perneras permiten llevar tornillos de hielo sin molestias. 
11. Un piolet RIDE: ligero pero diseñado con una cabeza completamente de acero para afrontar algunas partes técnicas del recorrido.
12. Un tornillo LASER SPEED LIGHT: la mitad del recorrido se atraviesan glaciares…
13. Crampones LEOPARD para las partes con nieve dura: nunca me llevo las cuchillas. Si no puedo ascender con seguridad con los esquís, me pongo crampones. Los crampones LEOPARD son rápidos de colocar y funcionan perfectamente con nieve dura y trabajada por el viento.
14. Un DVA (Detector de Víctima de Alud).
15. Una pala de carbono y una sonda ultraligera.
16. Un elástico de tracción rojo: si tú o tu compañero estáis cansados, podéis recurrir a ello. El elástico se engancha directamente a la mochila.
17. Un botiquín de primeros auxilios con material para detener una gran hemorragia o estabilizar una fractura mientras se espera la llegada del rescate.
18. Una funda vivac de emergencia que aísle un mínimo: es por si acaso y siempre un fondo de mochila.
19. Un casco SIROCCO: no sólo para protegerte de las caídas de piedras, sino también para proteger la cabeza en una caída. El SIROCCO está bien ventilado y es muy confortable para llevar por su ligereza.
20. Tres pares de guantes: un par de guantes ligeros para sujetar bien mis bastones, material o un tramo de roca para escalar; otro par de guantes para colocar por encima de mis guantes ligeros y provistos de una apertura para los dedos; un tercer par muy calientes pero que permitan sujetar mis bastones.
21. Dos cámaras de fotografía: una cámara clásica para las fotografías y una cámara compacta deportiva para el vídeo.
22. Pan blanco sin corteza y queso para untar: es fácil de comer, digerir y tiene poco azúcar. 
23. Geles energéticos de azúcar lento y cantimploras rellenas de electrolitos.
24. Protección completa para los ojos y el sol: cristales amarillos para esquiar por la noche y gafas de clase 4 durante el día. Mis gafas Gloryfy se adaptan de 2 a 4 según la luminosidad ambiental, lo que es práctico cuando hay niebla. Igual para mi máscara, que se adapta de 1 a 3 y ofrece un gran contraste. También llevo una cinta ligera y una gorra para evitar que mi cabeza se cueza con el sol.
25. Un segundo par de calcetines: no los he necesitado, pero 60 km es una larga distancia…
26. Bebida energética en polvo con electrolitos, azúcares lentos y proteínas. 
27. Botellas flexibles y una funda de agua: empecé con 2,5 litros para beber. Nos detuvimos una vez en el refugio Victor Emmanuel para rellenar nuestras cantimploras.