Comunidad News y vídeos LATOK I, 7145 M, CARA NORTE, UNA PRIMERA MUY ESPERADA

LATOK I, 7145 M, CARA NORTE, UNA PRIMERA MUY ESPERADA

El 9 de agosto de 2018, el británico Tom Livingstone y los eslovenos Ales Cesen y Luka Strazar lograron ascender el Latok I por su cara norte. Con sus 2400 metros de vertical, la arista norte del Latok I se ha intentado muchas veces en estos últimos cuarenta años sin éxito. Un gran logro para Tom en su primera expedición al Himalaya.

29 Agosto 2018

Alpinismo

Latok 1 = 2 x Espolones Walker

Imagina dos espolones Walker en las Grandes Jorasses, uno encima del otro, con la cima a 7000 metros. Así te puedes hacer una idea de las dimensiones reales. En pleno Karakorum, el grupo del Latok está repleto de bellas cimas y comparten una característica común: parecen inaccesibles. El Latok 1, el más alto con sus 7145 metros sólo ha sido ascendido una vez, por la cara sur, en 1979, por una expedición japonesa dirigida por Naoki Takada en técnica pesada. Pero la implacable cara norte se ha resistido no menos de treinta intentos registrados para ascender los dos quilómetros y medio de escalada de hielo y mixto, de una verticalidad increíble en estas altitudes. El intento más hermoso fue una de las primeras en 1978. El trabajo de cuatro americanos al viento: los hermanos Jeff y George Lowe, Michael Kennedy y Jim Donini. Los tres primeros frecuentaban Alaska y Donini fue el que completó la primera ascensión a la Torre Egger. Con pelo largo, sin boletines meteorológicos y sin ninguna intención de utilizar una táctica de asedio: los cuatro hombres optaron por la técnica cápsula, en la que mientras una cordada abre, la otra sube las mochilas. La arista norte, que se eleva desde el glaciar Choktoi, parece ideal. Ascendieron durante veinte días, se encontraron con una tormenta y tuvieron que retirarse a tan solo 150 metros de la cima. 85 rápeles, veintiséis días después y con muchos kilos menos, los cuatro compañeros llegaron abajo. Nació un mito: la cara norte del Latok 1 se convierte en uno de los “grandes problemas” en el Himalaya. Decenas de intentos seguirán, por parte de los mejores alpinistas en los años 80, 90 y 2000, incluyendo a Rab Carrington, Martin Boysen, los hermanos Benegas y más recientemente Colin Haley, Luka Lindic y Thomas Huber. Pero cada vez, el Latok 1 les daba un portazo en las narices en el Who’s Who del alpinismo.

La expedición

Tom Livingstone y sus compañeros eslovenos no tenían ni la menor idea que cuando llegaron, un equipo ruso había intentado la ascensión de la famosa arista norte, la línea más evidente. A Serguei Glazunov y Alexander Gukov les atrapó una tormenta que les impidió alcanzar la cima. En el descenso Glazunov murió en rápel y Gukov fue finalmente rescatado seis días más tarde, el 31 de julio por los helicópteros del ejército paquistaní. "Todo el mundo sabe que la vertiente norte del Latok 1 es uno de los grandes desafíos del Himalaya. La idea me llegó de mis amigos eslovenos. Conocí a Luka Strazar hace algunos años en Escocia y entablamos una buena amistad, ¡tenemos la misma visión de la montaña y el mismo sentido del humor! Estuvimos en contacto y el invierno pasado fui a escalar a Eslovenia, donde conocí a Ales Cesen. Lo mismo, nos lo pasamos muy bien juntos. Me propusieron unirme a ellos en su viaje para el verano de 2018 a Pakistán. Pero debo confesar que antes de marchar pensaba que era muy poco probable que consiguiéramos la cima”. Una vez en el campo base, después del accidente de Serguei, Tom Livingstone nos explicó su decisión de ascender. “Sí que estábamos afectados por lo que acabábamos de ver. Nos planteamos los tres si queríamos de todos modos intentar la arista. Tres días después del rescate de Alex, la montaña estaba en bastante buen estado después del mal tiempo, y decidimos ir”. Los tres alpinistas partieron a la una de la madrugada el 6 de agosto. “Las condiciones eran buenas, las goulottes con nieve dura. Algunos pasajes de hielo vertical y hueco, pero fue bien”, nos explicó Tom Livingstone. “La escalada era variada y sostenida, pero interesante. Es difícil determinar una graduación, pero nos pareció ED+. También tuvimos que sortear setas de nieve. Aunque en términos de dificultad técnica no era súper duro, el largo de la vía, la altitud y la falta de sueño la hicieron muy difícil.” A los tres cuartos de la vía, debajo de un bastión muy vertical de la arista, los tres decidieron hacer un flanqueo por la derecha para llegar al paso entre el Latok I y el Latok II y salir a la cima por la vertiente sur. Un itinerario que evita la última parte de la arista, pero una elección inteligente, que les llevó a conseguir la cima. Para Tom Livingstone, sortear este último tramo de la arista permitió ahorrar energía para el esfuerzo final. Nuestra prioridad era ascender el Latok desde la vertiente norte, lograrlo siguiendo toda la arista era la continuación”. Después, testigo del accidente de Glazunov un poco antes, después de la retirada de la cordada rusa en este bastión de la cima, la cordada de Tom, Ales y Luka consideró que lo más lógico era atravesar evitando esta última parte de la arista. “Teníamos la intención de atravesar por la derecha y acabar por la cara sur desde el principio. “¡Sabíamos que la última torre era difícil por el esfuerzo y el tiempo!”, explica Tom. El 9 de agosto, Tom, Ales y Luka estaban eufóricos de llegar a la cima del Latok, “en condiciones típicamente escocesas”. Dos días después llegaron al campo base. "En el Himalaya, la ascensión no acaba hasta que llegas al campo base.” Inmensamente felices. "Hemos tenido suerte", comenta Tom. "Tuvimos una bonita ventana de buen tiempo y formábamos una súper cordada." Nada mejor que hacer accesible lo que parecía, durante años, una pared imposible.

Los miembros de la expedición

Por ser su primera expedición al Himalaya, Tom Livingstone consigue una primera magistral. Miembro del Team Petzl UK, al británico de 27 años le encantan las escaladas comprometidas en paredes al borde del mar, en Gran Bretaña, y se apasionó por el mixto, con la realización de vías como The Secret IX 9 en el Ben Nevis o Cracking Up, IX 9 en Gales. Tom tiene una amplia experiencia alpina, con ascensiones de clásicos de los Alpes (Divine Providence en el Mont Blanc, invernal de la Walker en las Jorasses, vía Lesueur en los Drus) y menos clásicas en las Rocosas (vía House/Anderson en el Mt Alberta) y una primera ascensión de una vía extrema en Alaska, las Revelation Mountains, con el escocés Uisdean Hawthron, en el pasado mes de abril (Fun or Fear, Mont Jezebel). En cuanto a los compañeros de Tom, no se quedan cortos. El esloveno Ales Cesen, de 36 años, tiene una larga lista de importantes ascensiones (primera de la cara norte del Hagshu en India, cima norte del Gasherbrum IV). Luka Strazar tiene entre otras la primera ascensión a la cara oeste del K7 Oeste (con Nejc Marcic, en 2011).

Qué llevar – la mochila de Tom para el Latok

Material técnico:

Piolets QUARK – los piolets más adecuados para la vía, con los que se tiene un buen swing. Llevamos una lima para afilar las hojas y las puntas de crampones cada noche.
Crampones DART - igual, son ligeros y funcionan bien, son, sin duda alguna, mis preferidos. Hubiera podido llevar los DARTWIN para la vía, ya que finalmente había mucha nieve y hielo.
Pala para nieve.
Arnés SITTA – simple, ligero y equipado con dos CARITOOL. Perfecto.
Casco SIROCCO – muy ligero pero fuerte.
Cuerdas: 2 cuerdas RUMBA x 60m de 8mm, que quedaron muy estropeadas ¡después de 2400 m de escalada y 40 rápeles! (Para la foto añadí una Paso de 7.7mm).
20 metros de cuerda de 5mm para equipar los rápeles.
Empotradores (DMM n°1, 3, 5, 7, 9)
Tornillos para hielo – LASER LIGHT. 4 x 13cm, 4 x 17cm.
Dos mosquetones de rosca SPIRIT LOCK. 2 x SPIRIT SCREW LOCK
Dos mosquetones ANGE S. Dos cordinos en prussik
Pitones. V Conique 5cm.
Cintas exprés (4 x ANGE S medianas, 4 x ANGE S prolongadores). Muchos largos eran largos, a veces más de 100 metros.
Navaja y gancho Abalakov. Nos llevamos un gancho más por si acaso. ¡Indispensable!
V-LINK para los piolets. No queremos arriesgarnos a perder un piolet.
Camalots: del pequeño C3 al Amarillo n°2.
Cinta Tape en una bolsa de plástico transparente. ¿Quién no necesita Tape?
Una bolsa para agua MSR de 2 litros.

Iluminación:

Una frontal REACTIK+ con una batería adicional, en su bolsa naranja. Antes prefería las frontales con pilas como la MYO pero desde el año pasado sólo utilizo la REACTIK+, me convertí.

Calzado:

Un par de botas de La Sportiva G2, suficientemente calientes para la altitud.

Vestimenta:

Gafas Julbo Explorer 2.0
Chaqueta Mountain Equipment Vega (rojo, abajo, en el medio)
Chaleco Mountain Equipment Dewline (encima de la Vega)
Guantes Mountain Equipment Supercouloir
Mochila Mountain Equipment Tupilak 45L. Llena hasta el borde al principio y ¡casi vacía al final! Pantalones Mountain Equipment Tupilak
Chaqueta impermeable y transpirable Mountain Equipment Tupilak Atmo (arriba a la derecha)
Guantes Mountain Equipment Randonee Gauntlet (medio)
Manoplas Mountain Equipment Citadel (derecha)
Chaqueta Mountain Equipment Transition (roja)
Camiseta primera capa Mountain Equipment (azul)
Peto Mountain Equipment Eclipse
Mallas Mountain Equipment Compressor
Buff La Sportiva
Calcetines Smartwool